Consejos para dormir en el avión

Después de tanto tiempo esperando por fin tienes fecha para tu viaje del verano. Los billetes listos, la maleta preparada, el plan perfecto para empezar las vacaciones nada más aterrizar… ¿Conseguirás dormir en el avión para empezar descansado y aprovechar el día? Te dejamos los mejores consejos para dormir en el avión, para que el inicio del viaje sea mucho más ameno.

– ¡Cánsate! Sí, haz con tu cuerpo lo mismo que se hace con los niños y los perros cuando quieres que duerman toda la noche. Cánsate durante el día, haz deporte, muévete, duerme poco el día anterior y no cierres los ojos antes de embarcar. Subir al avión bien cansado es el primer paso para poder dormir.

– Olvida los estimulantes. Se acabó el tomar un café en el aeropuerto mientras esperas la hora de embarcar. La Coca Cola tampoco es una buena opción, ni siquiera un té ni ninguna bebida que contenga cafeína u otro estimulante. Lo más apropiado es una copa de vino que ayuda a dormir, eso sí, solo una que no querrás que te echen del avión antes de despegar.

– Elige tu asiento. Los viajeros experimentados saben perfectamente cuál es el asiento con más espacio para estirar las piernas y en qué zona el avión está más tranquilo. Si tu propósito es dormir, huye de los asientos cercanos a los baños y elige ventanilla antes que pasillo. Lo más importante es poder apoyar la cabeza y que nadie te moleste al pasar.

– Siempre ropa cómoda. Que las celebrities hagan de LAX una pasarela no significa que todos los aeropuertos lo sean. Ólvidate de los tacones y los vestidos estrechos. Busca unos pantalones cómodos (los pijamas son válidos solo en los vuelos de más de 8 horas) mejor que no sean vaqueros. Lleva siempre una sudadera o camiseta de manga larga, el aire acondicionado en agosto es peor que el frío de diciembre. No te olvides de proteger el cuello, un pañuelo es el complemento más útil en cualquier vuelo, servirá desde almohada hasta de manta.

– Relájate. Hay veces que por muy cansado que estés el estrés no te deja dormir. Olvídate de todo, ¡estás de vacaciones! Utiliza unos cascos para evadirte del resto de pasajeros y algo de música que te ayude a desconectar.

– La buena postura. A día de hoy la posición perfecta para dormir sentado sigue siendo una incógnita. Dependiendo del cuerpo y altura de cada uno, hay personas que están mucho más cómodas apoyadas en la mesilla y otras acurrucadas sobre si mismas convirtiéndose en un ovillo (solo para yoguis expertos). Escucha a tu cuerpo y cómo estás mejor, si te duermes en una mala posición cuando despiertes terminarás prefiriendo no haber descansado nada.

– Abrígate. No solo la ropa es importante. En los viajes largos una manta y unos calcetines son imprescindibles, mejor también si llevas tu propia chaqueta o abrigo para cubrirte ya que las mantas de los aviones no destacan por su calidad precisamente y, por mucho que lo pidas, nadie bajará la intensidad del aire acondicionado.

– Medicinas sí o no. Ni medicamentos naturales ni somníferos. Esto solo hará que empeorar el jet lag y minimiza los reflejos en caso de emergencias.

¿Podéis dormir en los aviones o sois más de insomnio durante el vuelo? ¿Cuáles son vuestros trucos para dormir en el avión?

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