Madre no hay más que una, pero al final todas dicen las mismas cosas. ¿Que no? Atento a este TOP Wayna, seguro (segurísimo) que has oído alguna de estas frases salir de la boca de tu estimada progenitora.

8 – Llévate la cazadora, que allí refresca.
Un clásico. No importa si tienes pensado irte a la Patagonia o a Málaga en pleno agosto. Tu madre siempre querrá que vayas bien abrigado. Siempre “por si acaso”.

7 – ¡Envíame un Whatsapp cuando llegues!
Y es que, amigos wayners, el guasap ha hecho mucho daño en la relación madre-hijo/a. Si antes eran “las perdis” o los SMS, ahora es la app de las cacas con ojos y las flamenquitas quien domina la comunicación del viajero. Eso sí, al final el resultado es el mismo: tranquilizar un poco a tu pobre madre, que no sabe nada de ti. Ahora bien, que tu madre controle el Whatsapp es otro tema.

6 – ¿Qué has comido?
Otro clásico, pues no hay nada que deje más satisfecha a una mamá que saber que su retoño está bien alimentado. Por supuesto, tú responderás que “una ensalada y algo de pescado”. Luego, al volver, todos se preguntarán qué llevarían esas ensaladas que te han hecho engordar 5kg en una semana.

5 – ¿Qué tal el albergue/hotel? ¿Te tratan bien? ¿Has dormido mucho?

Consejo: lo primero que tienes que hacer al llegar a tu alojamiento es enviarle una foto a tu madre. Le ahorrarás muchos disgustos. En caso de compartir habitación o piso con algún desconocido, procura que salgan en la foto con su mejor sonrisa.

4 – Ten cuidado con la gente…
Para una madre, el mundo es un lugar peligroso (especialmente para su hijo/a). Tiene mil anécdotas que lo sustentan, como que a la hija del vecino del tercero le pasó tal y cual… Hay cosas que, por mucho que pase el tiempo, no cambian, y el hecho de que tú seas su pequeño/a es una de ellas.

3 – ¿Qué has comido?
Otra vez. Y otra, y otra…

2 – ¡Acuérdate de tu familia que te quiere!
Traducción: cómpranos algo, anda.

1 – ¡Hazte muchas fotos!
Porque aunque es cierto que la mayoría de tu familia y amigos no quiere ver el PowerPoint de las fotos de tu viaje, hay una persona que sí: efectivamente, tu madre. Porque no importa dónde estés; el amor de una madre traspasa fronteras.

 

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *